RIVERO, LUIS
El lenguaje no es una manifestación aséptica, sino que está cargado de significados subliminales. Yo intento definirlo de la manera más simple posible como que el uso de voces o expresiones determinadas en el discurso no es nunca caprichoso ni es fruto del azar, Sino que arrastra consigo una significación que trasciende a la propia conciencia del hablante. Es decir, que contiene un sustrato inconsciente y significante que a veces escapa a nuestro propio conocimiento. Por eso son importantes la etimología y la simbología de las palabras que usamos en los dichos.